El ingrediente protagonista de la Mona de Pascua es el chocolate, pero ¿sabías que las primeras monas que aparecieron eran de pan? El bizcocho y los huevos duros llegaron más tarde y no fue hasta el siglo XIX cuando se incorporaron las piezas de chocolate, que hoy en día se han convertido en objeto de creatividad y reclamo con figuras sorprendentes. Sea como fuere, la tradición consistía en que el padrino regalaba a su ahijado o ahijada este dulce como símbolo de protección. El bollo en cuestión contenía tantos huevos como años tenía el menor hasta que este cumplía los 12. La entrega de la Mona se hacía el Domingo de Resurrección y el Lunes de Pascua se reunían todos para comerla. Hazlo tú mismo Necesitarás un bizcocho esponjoso. Puedes preparar tu receta favorita o utilizar uno comprado. En nuestras tiendas cuentas con bases como la de Dillepasa con la suavidad y el sabor de un bizcocho casero para ponértelo fácil. Añade chocolate derretido para la cobertura y, por supuesto, adornos de Pascua como huevitos de chocolate, conejitos, plumas o pollos de colores o en cascarón, elaborados por marcas de aquí como Simón Coll, Dillepasa y Rubies.